nick escuchO el suave chasquido, pero no colgó. No había bromeado acerca del bulto de sus pantalones y no había forma de que pudiera darse la vuelta todavía. Tenía que quitarse la imagen de ella con la flor sobre los senos o nunca podría abandonar aquella cabina. Desde luego, miley era sorprendente. Cuando se había propuesto a sí mismo como su amante del verano, no había imaginado que fuera a abrir tal caja de Pandora. Cuando por fin pudo, colgó.
Su padre lo esperaba a pocos metros.
-Hola, papá -se acercó con una sonrisa desenfadada-. Pensé que te pasarías la tarde discutiendo con Henderson acerca de ese semental.
-He decidido darme un descanso para que él piense en la última oferta que le he hecho.
Andy MacDougal era un hombre alto y fibroso que parecía más joven de su edad, igual que Norah, la madre de nick .
-Apuesto a que es un lío de faldas -dijo Andy-. ¿Me equivoco?
nick sonrió.
-Podría decirse que sí.
-También me da la sensación de que esta vez podría ser una novia en serio.
A nick no le gustó oír aquello.
-No. No estoy preparado para sentar la cabeza todavía.
-Pues yo creo que sí. Te he visto cómo miras a los cyrus y a sus familias. Lo que creo es que eres muy selectivo y eso está bien. Pero nunca te había visto tan distraído. Así que, si la mujer a la que llevas todo el día llamando está preparada para formar un hogar y una familia, te sugiero que vayas adelante.
-No lo está.
-¡Oh! -miró a su hijo un largo momento-. ¿Quieres que vayamos a tomar un perrito caliente y una cerveza fría y hablamos de ello?
-El perrito y la cerveza me parecen bien, pero no hay nada de que hablar.
-Si tú lo dices... pero la oferta queda abierta para cuando quieras.
-Ya lo sé, papá. Y te lo agradezco -nick pasó el brazo por los hombros de su padre-. Vamos a comer. Me estoy muriendo de hambre.
No hay comentarios:
Publicar un comentario